¿Quieres proteger tu sofá y cambiar el estilo de tu salón?

Esta decisión no puede traer mas de un quebradero de cabeza, para tu decisión sea la más rápida y acertada, hoy te traemos unas ideas para tu elección.

En cuanto a fundas de sofá, podemos encontrar un sinfín de modelos: fundas elásticas, fundas dúo, salvasofá, etc.

¿Qué queremos que cubra nuestra funda de sofá?

Existen fundas que cubren el sofá completamente, algunas solo el respaldo y el asiento, y otras que son más decorativas.

Según tu decisión, deberás elegir una funda de mayor o menor tamaño.

¿Cuál es la medida de nuestro sofá?

Medir bien el sofá es una tarea indispensable, ya que la funda es conveniente que quede perfectamente ajustada a tu sofá.

Si elegimos una funda de sofá que quede pequeña, el resultado no será el óptimo, y si, por el contrario, escogemos una muy grande, sobrará mucho y decorativamente hablando, no será bonito.

¿Qué tejido debe tener nuestra funda?

Algodón: sin duda, uno de los materiales estrellas.

Se trata de un tejido ligero, resistente y muy fácil de lavar. Se caracteriza por un tacto suave, duradero que aportará un estilo casual a nuestro salón.

Twill: mezcla entre algodón y poliéster.

Su ligereza y alta durabilidad, hacen que sea de los más usados en casas con niños o mascotas.

La principal ventaja de este tipo de funda de sofá es su alta resistencia y su facilidad para lavar.

Strecht: el más utilizado si quieres una funda elástica.

Estas fundas son de fácil limpieza y sus colores duran más tiempo.

Si cuentas con un sofá con líneas irregulares o difícil de ajustar, este material es el idóneo.

Encuentra los cojines ideales para tu sofá.

Una vez elegida nuestra funda de sofá, es importante encontrar los complementos idóneos para que la sala quede estupenda.

Encuentra unos bonitos cojines a juego con tu funda y consigue un toque elegante para tu salón.

Si, prefieres un salón más vivo y dinámico, busca unos cojines con diferentes colores y tamaños.

Tendrás un sofá precioso y perfecto para descansar.